Ayudar a las personas a que las cosas sucedan

Años más tarde comencé a trabajar en RRHH donde me di cuenta que era necesario conocer más del negocio, para que el impacto del área fuera transversal y sistémico, razón por la cual decidí hacer el MBA. Esta experiencia me permitió transformar mi perspectiva, porque comprendí podía aportar valor mediante el acompañamiento a las organizaciones y a sus líderes ayudándolos a entender el comportamiento humano como dimensión estratégica. De todas maneras, mi foco no cambió, seguía siendo: “ayudar a las personas a que las cosas sucedan”.

Fue así cómo conocí una enorme cantidad de empresas, grandes, medianas y chicas, lo que me dio la posibilidad de conocer muchas realidades diferentes. Esto me permitió visualizar que las distintas personas respondían de un modo totalmente distinto al mismo sistema organizacional y no alcanzaba con diseñar políticas para que las cosas sucedieran. Me preguntaba ¿Qué tan alienadas están las decisiones que tomamos en nuestras organizaciones con el sistema social al que pertenecen? Y fue allí que comencé en el 2013 el Doctorado en Sociología UCA.

...las transformaciones no se imponen, se facilitan

El mayor aprendizaje de esa época fue descubrir que las transformaciones digitales eran en esencia transformaciones sociales y culturales, por tanto, no debían ser tratados meramente como tecnológicas. Encontré un nuevo punto de dolor; “las transformaciones no se imponen, se facilitan”.

Guiada por la curiosidad y ambición de ir siempre por más, empecé la Certificación de Coaching Ontológico en búsqueda de una nueva metodología para resignificar mi rol, pasar de dar respuestas a hacer preguntas poderosas.

Hoy en día puedo ver, cuando facilito las transformaciones tanto a nivel organizacional como individual, que en mi mirada se ha integrado toda mi historia. Pienso, siento y hago como un nuevo SER. Haber sostenido mis cambios mediante un propósito en el tiempo, me ha permitido transformarme. Pero queda mucho por descubrir. No sé bien aún qué, pero lo que sí sé es que necesito hacerlo de una forma ágil, exponencial, aprendiendo en el hacer y equivocándome… ¡Allá vamos!

LINA ZUBIRÍA